L’Arrabassada, Sant Joan, Campanyà, La Vall de Gausac y Las masias
Al principio del siglo se construyó en L’Arrabassada el casino del mismo nombre.
Un complejo de edificios y parque de atracciones en torno al cual se levantaron algunos chalets dispersos, comunicados con Barcelona por una línea de tranvía.
La prohibición del juego y un incendio hicieron que la zona se paralizara
Fue en la década de 1960 cuando empezó la urbanización de iniciativa barcelonesa de la Ciudad Condal, en la cabecera del Rabassalet.
También en plena sierra de Collserola está la urbanización Sol-aire, situada en la vertiente levantina de la sierra del Pedregal.
El sector aislado más moderno, en el linde con Cerdanyola, es el llamado Sant Joan, al norte de la población.
Se trata de una zona de servicios, ocupada por escuelas privadas, oficinas, servicios médicos y empresas, incluidos los estudios de televisión de RTVE.
Entre la ciudad de Sant Cugat y la villa de Rubí se encuentra el antiguo pueblo de Campanyà.
Está documentada desde el 1047, es de origen románico y fue reformada en el siglo XVIII.
El lugar, documentado desde el 991, fue dado en Sant Cugat el 1120.
La iglesia es conocida, también, por su segunda advocación, San Mamet.
Cerca del límite con Rubí, borde Ca n’Ametller, está la capilla de Sant Llorenç de Foncalçada
En el siglo XV era de Sant Cugat.
La iglesia de Santa Maria de Gausac, en el valle de este nombre, está documentada desde el 986.
Se veneraba a la Mare de Déu del Bosc y la iglesia fue conocida con este nombre en perder la parroquialidad.
Modernamente se conoce por la nueva advocación de Sant Adjutori.
Es un edificio románico, de planta circular, cubierto con bóveda hemisférica (en las paredes hay aparato de espiga).
En el mismo valle de Gausac o de Sant Medir está la capilla de Sant Medir
Esta capilla pertenecía al monasterio de Sant Cugat, cuyos monjes la dotaron el 1080.
Era una de las antiguas parroquias del monasterio y fue refundida en el siglo XV con la parroquia de Sant Pere d’Octavià.
La capilla tiene un relieve gótico en la fachada, fechado el 1447.
En la parte baja de este valle de Gausac está la Torre Negra, masía fortificada que se ha identificado con la fortaleza de Puig Ricard, que mandó edificar el abad Ermengol el 1145.
Además, en el otro lado del arroyo está el formidable pino d’en Xandri.
En un valle paralelo al de Gausac, drenado por el torrente de Sant Vicenç, se conservan los restos de la antigua iglesia de Sant Vicenç de Vallarec.
Esta iglesia, también llamada del Bosc, está documentada desde el 1096, que había ejercido funciones parroquiales.
Siguiendo las estribaciones de la sierra de Collserola encontramos la masía de Can Bell.
Casi casi tocando hay dos casas modernistas del arquitecto E. Balcells y Buigas: la Casa Calado (1905) y la Casa Lluch (1906).
Tampoco podemos pasar por alto la existencia de algunas masías como son:
Can Marcet, Can Vallet y Can Canyameres, que, sin pretensiones, son un buen testimonio de las masías de tapia y portal de piedra de medio punto del siglo XVI.
L’Arrabassada, Campanyà y La Vall de Gausac. Sant Joan y Las masias