Descubre la catedral de Vic
La Catedral de Vic es el templo principal del obispado de Vic, que tiene como titular Sant Pere, en la comarca de Osona.
Evolución de las edificaciones
El primer centro episcopal y la primitiva catedral, documentada desde el 516, se encontraban junto al templo romano, en el área ocupada actualmente por la iglesia de la Piedad.
Fueron destruidos por las incursiones sarracenas y la destrucción de la ciudad del 826.
Cuando se repobló la ciudad a partir del 879 y al erigirse de nuevo el obispado hacia el 885, se construyó un nuevo grupo de iglesias episcopales en la parte baja de la ciudad.
Esto fue cerca del nuevo Vicus Ausonae, dedicadas a San Pedro, Santa María y San Miguel.
Por la precocidad de la primera construcción, hubo que hacer nuevas obras, las dos primeras el 925 y en la tercera el 956.
Cerca de esta catedral se formó la primera canónica aquisgranesa, que fue estructurada de nuevo y dotada el 957.
Antes del 970 la catedral de San Pedro fue ampliada, pero no resistió el empuje renovador del obispo Oliba.
También, hizo construir una nueva catedral, de una gran nave con transepto y cinco ábsides, con un esbelto campanario a su lado, que fue consagrada el 1038.
En la misma catedral de Vic construyó una cripta, en la que aprovechó capiteles de tipo califal de la obra anterior.
La canónica de Vic no tenía prácticamente vida comunitaria a principios del siglo XI.
A pesar de no tener ningún renovación sustancial, como los del resto del país, recibió un gran empuje de la acción de Oliba.
Además, creó un activo escritorio, que regentó el canónigo enmiendas quintil entre los años 1029 y 1080.
Muchos de estos libros se conservan todavía en el archivo capitular.
La renovación de Oliba englobó la iglesia de San Miguel.
La de Santa María también fue reemplazada en 1180 por otra de plano circular, que subsistía la actual plaza de la catedral hasta el 1781.
Junto a la catedral se halla edificio de la canónica, con un amplio claustro de arcadas simples.
Es de finales del siglo XI, de la época que el obispo Berenguer Sunifred de Lluçà.
Sobre este claustro de la catedral de Vic se construyó a partir del 1.323 uno nuevo, de esbeltas arcadas de ojiva.
Hacia el 1401, bajo la dirección del maestro Antoni Valls, se modificó el presbiterio.
También se hicieron capillas en el extremo del transepto.
Además, se prescindió de la cripta para dar lugar al gran retablo gótico de alabastro, aunque conservado, obra de Pere Oller (1424).
El número de canónigos, que residían cerca de la catedral, fue fijado en 30 en 1229.
Época en que se creó también una nueva escuela catedralicia, que tenía dos cátedras, de gramática y lógica, a partir del 1238, y se redujo a 20 a partir del 1264.
Los canónigos mantenían además un hospital de peregrinos o hospedería, del que queda una buena parte de la edificación.
A principios del siglo XVII hubo el intento de construir una nueva catedral, y se edificó sólo la capilla de Sant Bernat Calbó, bajo el campanario.
Seguida también, de las capillas inmediatas que forman el lado del Norte de la catedral actual.
En 1781 el obispo Antonio Manuel de Hartalejo decidió la nueva construcción según los planes del arquitecto Josep Moretó.
Para tener más espacio se derribó la rotonda de Santa María y se desmontaron los claustros, que fueron reconstruidos más tarde, un poco más reducidos y sin capillas.
La nueva catedral, ocupa todo el ámbito y transepto de la románica.
Se construyó, aprovechando las capillas del lado Norte, de estilo neoclasicista.
Su gran estructura, fría y un poco desamparada, fue decorada por el pintor Josep Maria Sert antes del 1930.
En julio de 1936 fue incendiada, se perdieron las pinturas de Sert y derrumbaron las bóvedas de las naves.
Fue reconstruida a partir de 1940.
Se abrió de nuevo la antigua cripta románica, excavada y reconstruida con sus elementos genuinos, y se construyó el deambulatorio.
Allí se colocó además el antiguo retablo de Pere Oller.
La capilla de Sant Bernat Calbó conserva la urna barroca de plata que contiene los restos de este obispo.
Junto al claustro se encuentra la antigua sala capitular, terminada en 1350.
También se conseerva la capilla de la Redonda, edificada por el arquitecto Josep Moretó.
En junio de 2018 se anunció el descubrimiento de una gran nave románica de la canonja medieval.
La sala, de unos 30 metros de largo y 7 de anchura, es cubierta por una bóveda de medio punto.
La fecha de construcción se sitúa en el siglo XI, en la época del obispo Oliba.
Posteriormente, el espacio fue descabezado por la parte norte y sur y el cuerpo central quedó escondido entre otras edificaciones.
Las divisiones interiores para emplazar la cripta y la bodega acabaron de ocultar este antiguo espacio.
Esto fue a partir del siglo XIV, con la construcción de la sala capitular y el claustro góticos en el piso superior.
La cripta está actualmente situada bajo el presbiterio, pero antiguamente bajo el ábside, fue agrandada en la segunda mitad del siglo XII, añadiendo tres tramos hacia el oeste, que le dieron el doble de longitud.